El 17 de octubre de 2023, el Consejo Europeo anunció un acuerdo que implica aumentar las condiciones del camino hacia la descarbonización del transporte pesado en la Unión Europea (UE). La propuesta revisada se centra en la reducción de las emisiones de CO2 en el sector del transporte por carretera y establece objetivos más exigentes para 2030, 2035 y 2040. El objetivo final es que la UE alcance sus metas en la lucha contra el cambio climático.
Las nuevas normas pretenden promover una mayor proporción de vehículos de emisiones cero en el parque de vehículos pesados de toda la UE, mientras se fomenta la innovación y la competitividad en el sector. Esto implica una serie de objetivos de reducción de emisiones: un 45% para 2030 (en lugar del 30% original), un 65% para 2035 y un 90% para 2040. Además, se estableció un objetivo del 7,5% para remolques y semirremolques.
La propuesta también amplía la cobertura del reglamento para incluir una amplia gama de vehículos pesados nuevos, desde camiones más pequeños hasta autobuses urbanos y remolques, todos sujetos a objetivos de reducción de emisiones. Sin embargo, se establecieron exenciones para pequeños fabricantes y vehículos utilizados en áreas como la minería, la agricultura y servicios de emergencia.
Además, el Consejo Europeo modificó la definición de «vehículo pesado de cero emisiones» para incluir vehículos propulsados por hidrógeno y camiones combinados extrapesados (EHC). La eficacia de estas medidas se revisará en 2027, un año antes de lo propuesto originalmente por la Comisión Europea.
A pesar de estos avances, el acuerdo ha generado cierta controversia. Algunos críticos, como Raluca Marian, Directora de Defensa de la UE de IRU, expresaron su preocupación acerca de la falta de preparación de la infraestructura para vehículos de cero emisiones en áreas urbanas y redes de carreteras de la UE. Marian también destacó la dificultad de alcanzar los objetivos establecidos. Sin embargo, el Consejo mantuvo una ventana de oportunidad para camiones con combustible neutro en carbono hasta 2040.
Este acuerdo servirá como mandato para las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre la legislación final. La UE está decidida a liderar en la lucha contra el cambio climático y transformar el transporte pesado en un sector más respetuoso con el medio ambiente.